A PENEDA-MEADINHA (PARQUE NACIONAL da PENEDA-GERÉS, PORTUGAL) 28/04/13

En una mañana fresca y soleada, aunque con algunas nubes en el cielo, once componentes del Club Peña Trevinca de O Barco: Mª del Carmen, Francisca (Paquita), Marga, Dina, Ángel, Carballo, Manolo, Francisco, Federico, Enrique y Carlos; nos fuimos a hacer esta ruta circular el día 28/04/13 por el estupendo Parque Nacional de Peneda-Gerés (Portugal), contando con el apoyo e indicaciones del guía Ángel Pereira, buen conocedor de la zona.

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Después de desayunar en el restaurante (al lado del Monasterio), al que nos invitó amablemente Mª del Carmen, partimos a las 09:52 (hora de Portugal). Comenzamos subiendo las escaleras del Monasterio (verdadera obra de arte) hacia su parte posterior y salimos, a la derecha (que luego giraría a la izquierda), a una calzada bien empedrada con rocas de granito colocadas perfecta y arduamente por personas de antaño, siendo así en prácticamente toda la ruta. Al principio, había un constante repecho muy pindio (es decir, muy pendiente; como se dice en algunas regiones del norte de España, especialmente en Cantabria), que atravesaba en continuos zigzags un bosque con algunos robles, pinos y arbustos; así como otro tipo de árboles que no supimos identificar, hasta alcanzar, en un primer momento, la gran roca de escalada “A Meadinha” (donde en un panel se pueden ver las múltiples variantes de vías abiertas para deportistas de diferentes niveles). Dicha roca destaca y se ve desde la base de Santuario, detrás y a su izquierda y, en su perfil derecho, nos podemos imaginar la cara de un “hombre serio” con cabeza rapada, ojos, nariz y boca y con un gesto que parece indicar que no le gusta que lo utilicen para escalar. Esto fue un preludio de las sorpresas que nos aguardaban en esta imponente montaña totalmente granítica.

De aquí en adelante y a medida que ascendíamos tuvimos unas mejores vistas sobre los cuidados pueblos de teja roja, así como de los bosques, que poco a poco iban desapareciendo para dejar paso a enormes rocas graníticas de caprichosas formas. Cada uno de nosotros tuvimos una percepción diferente de las mismas y nos imaginamos diferentes personas, animales o cosas.

Pasamos por simples y originales puentes a base de grandes piedras planas, uno de ellos sobre una pequeña y bonita cascada (ver foto). En nuestro continuo caminar, y siguiendo la gran cantidad de hitos y marcas horizontales de pintura amarilla y roja (PR = pequeño recorrido) colocados para ayudar a seguir la ruta, también nos encontramos con una pequeña presa: “pântano, romeiros da Peneda” (según rezaba en un poste de madera). Contenía un escaso reguero de agua que cruzamos por la cima de su estrecha pared. A ambos lados tenía postes metálicos pintados de color verde y nos encontramos con dos impresionantes piedras (una en un lateral y otra central más llamativa y grande). Lo recorrimos hasta el fondo para seguir subiendo, más suavemente, por sendas de tierra y por una calzada de piedra que se iba haciendo más estrecha y sinuosa, hasta el punto de que a veces se perdía (seguimos por senda de tierra) y volvía a surgir de nuevo más adelante.

En estos parajes vimos indicios de un antiguo incendio, casi imperceptible si no fuera por los escasos árboles que hoy son “esqueletos blancos”. Estos árboles llamaron poderosamente nuestra atención debido a la devastación de la vegetación y pensamos: “¡Qué bonito sería el lugar si estuviesen vivos en medio de esta gran mole de rocas!”

Todavía continuamos ascendiendo un poco mientras admirábamos las figuras de las rocas a nuestro paso, siempre intentando descubrir que representaban. Llegados al punto más alto, el viento y el frío se acentuaron por un breve espacio de tiempo ya que en el descenso se hicieron notar menos. Desde este punto veríamos un pequeño pueblo en un valle verde que detrás tenía una montaña “sembrada” de molinos eólicos (un parque eólico o central eólica es una agrupación de aerogeneradores). Bajamos por las sendas encañonadas de un desfiladero que nos llevaría a una carretera. Allí, al borde de ella, encontramos un poste que indicaba: “Rota de Romeiros de Sistelo da Peneda” (traducido: ruta de romeros). Dicha ruta era utilizada por los romeros devotos a la Virgen y la recorrimos unos 400 m para, al final, tomar, a la derecha, otra vez la calzada donde otro poste (tirado en el suelo) nos indicaba hacia el Parque o hacia Meadinha. Tomamos esta última dirección, que era la correcta.

Después, ascendimos un tramo de dificultad moderada, llaneando en algún trecho, para comenzar a descender, otra vez, por un encajado y pronunciado desfiladero con las mismas perspectivas del terreno anterior hasta las proximidades de Bouça dos Homens -Gavieira ya perteneciente a Arcos de Valdevez-. Aquí, de nuevo hallamos un bosque de pinos que, al final, desembocaría en la carretera. No hay otro remedio que seguirla durante unos 1500 m pasando por un pueblo, con un río a su izquierda (según el sentido de nuestra marcha) y una fuente de la que manaba abundante agua. La fuente estaba incrustada en una pared de piedra con una placa de granito que decía: “Eu sou fiel amigo do homem de pau e manta, deixei esta fonte quí para refrescar a garganta. Antonio Fernandes, Maio de 1995.” A continuación de la fuente y ya, en pocos metros, llegamos a la explanada del Santuario donde teníamos aparcados los coches.

Nos cambiamos y fuimos a Vila de Castro Laboreiro, donde teníamos encargada la comida en el restaurante Miracastro. Degustamos los productos propios de la zona, como el “bacalao a broa” y la “vitela asada no forno”, que son especialidades de la casa junto con el cabrito, que no pudimos probar por estar ya agotado debido a la gran afluencia de gente a aquella hora en el comedor. A cambio, disfrutamos de una jugosa “vitela” (carne de ternera), acompañada de un buen vino tinto, entremeses, postre y licores; por lo que salimos con el estómago “contento”. A continuación regresamos, unos a Ourense y los demás a O Barco.

Amigos míos, ésta es una ruta diferente a la inmensa mayoría de las que conocemos (personalmente conozco otra parecida en el monte O Pindo en la provincia de A Coruña, Galicia). Por su similitud con ésta, cito las palabras de Jesús Vega sobre O Pindo:
“El Monte Pindo", es un monte manso en el que -según dicen-, se realizan actos de brujería o ritos satánicos. Son curiosas las formas de algunas de las rocas, incluso alguna con forma de cabeza humana.

Esta masa granítica es conocida también por el nombre de “Olimpo Celta galaico”. Las abstractas figuras que forman sus rocas dieron lugar a numerosas historias de monstruos, hadas y demás seres sobrehumanos.

Entre las localidades cercanas a este singular monte, está el coqueto pueblecito pesquero que lleva su nombre; la cercana Carnota, donde está la mayor playa de Galicia y el mayor hórreo (siglo XVIII), declarado monumento nacional; Al otro lado (mirando hacia Santiago), Ézaro, con la desembocadura en cascada del río Xallas (a causa de una canalización desde un embalse hasta una central eléctrica a los pies de la ría, ya sólo puede verse el espectáculo una vez por semana, concretamente los domingos). La cascada del río Xallas, una de las más altas de Galicia y -tal vez- el único río que desemboca en el mar después de caer vertiginosamente en forma de cascada a un corto tramo de río”.

Por lo tanto, os recomiendo ambas, aunque a muchos nos queden un poco lejos. A cambio dejaréis que vuestra imaginación vuele, descubriendo formas y cosas increíbles e insospechadas, que otros senderistas en el mismo lugar y momento verán con otra perspectiva diferente.

Que vuestros sueños de recorrerlas se hagan realidad y tengáis un ¡¡Buen camino!! Aunque sea de granítica piedra. Hasta otra.

DATOS GPS:
General
Título A PENEDA-MEADINHA
Nombre del inicio: Santuario de Nuestra Señora da Peneda
Comentarios del Track:
Dificultad Fácil
Actividad Senderismo
Valoración Espectacular
Circular Sí
Terreno Mayoritariamente Calzada empedrada

Fecha y Hora
Día 28-04-2013
Hora de salida 10:50:59 (horario de Portugal 09:50:59)
Hora de llegada: 14:18:08 (horario de Portugal 13:18:08)
Duración 03:27:09
Tiempo parado 00:50:34
Tiempo en movimiento 02:36:35

Distancias
Distancia con alturas 10.34 km (reales 10.8 km)
Ascen.acum. 775 m
Altitud Máxima 1279 m
V.media mov. 3.8 km/h
Duración 03:27:09
Tiempo parado 00:50:34

Alturas
Track con altituds (3D): Sí
Altitud Máxima 1279 m
Altitud Mínima: 667 m
Altitud de la salida: 674 m
Altitud de la llegada: 668 m
Ganancia desde la salida 604 m
Desnivel salida-llegada -6 m
Desnivel máximo 611 m
Ascen.acum. 775 m
Desc.acum. 779 m
Max. Velocidad Vertical 3057 m/min
Min. Velocidad Vertical: -849 m/min
Max Pendiente 62.6 %
Min Pendiente -68.7 %

Velocidades
Velocidad media 2.9 km/h
V.media mov. 3.8 km/h
Velocidad máxima 8.4 km/h
Ritmo 22 min/km
Ritmo en movimiento 17 min/km