Ruta de las Ermitas de Bossòst

Ruta circular desde Bossòst para visitar las ermitas protectoras del pueblo, construidas, según la leyenda, para evitar que la peste llegase al pueblo.

Salimos caminando desde el parking situado a la salida norte del pueblo por la calle San Roc y, a los pocos metros, encontramos la primera de las ermitas, la Ermita de San Roc. Continuamos por un sendero y después de unos 300 metros giramos a la izquierda, indicado a Sant Joan Crisòstom, dejando de frente el sendero hacia Les.

El sendero sube por una zona más rocosa hasta llegar a otro desvío hacia Sant Joan Crisòstom, que pasamos de largo para acercarnos hasta Era Còva. Es una gran cueva en la que se encuentran las ruinas de la Ermita de Santa Eulália y desde la que tenemos buenas vistas de Bossòst y del Valle del Garona.

Volvemos hacia atrás unos metros y subimos por la empinada ladera hasta Era Castèra, punto más alto de la ruta a 904m, donde se conservan las ruinas del antiguo castillo de Bossòst. Regresamos por el mismo sendero hasta el cruce hacia la Ermita de Sant Joan Crisòstom y continuamos nuestro camino hacia ella.

El sendero baja primero por una zona rocosa, pero poco a poco va entrando en una zona más boscosa, con avellanos y abedules, atraviesa un bonito arroyo, y llega hasta la Ermita de San Joan Crisòstom. Continuamos bajando por la pista, hasta llegar de nuevo a las calles del pueblo. Pasamos por el lavadero y, al final de la calle, llegamos a la Ermita de Sant Cerat, una de las más bonitas de la ruta, con un interesante ábside.

Volvemos sobre nuestros pasos hasta el lavadero y bajamos por la calle que sale frente a él. Vamos bordeando el pueblo hacia el sur hasta llegar a la Ermita de Mair de Diu dera Pietat. Cruzamos la carretera y volvemos hacia el centro del pueblo por la orilla del río Garona. Al llegar al centro, cruzamos el puente sobre el río para visitar la séptima y última ermita de la ruta: Ermita de Sant Fabian y Sant Sebastian.

Desde aquí, cruzando de nuevo el río y la carretera, nos acercamos hasta la Iglesia Mair de Diu dera Purificacion, románica del siglo XII, que merece la pena visitar para ver sus diferentes portadas y el triple ábside decorado al estilo lombardo. Callejeamos por el pueblo hacia el norte para volver de nuevo al parking.