Por toa la Calderona

De esos dias que te pones a dar pedales y te vas viniendo arriba y te vas yendo, y te vas, y terminas ido. Pues eso, he terminado pidiendo la hora.
Dejo el coche en el parking, km 0, y empiezo a subir hacia Potrillos. Precioso ascenso con tramos de cierta exigencia.
De Potrillos por el coll del Espartal a Serra y la pista que sube al Llentiscle. En la fuente y tras 12 km sin parar, me pego una ducha y me encamino hacia Tristán. Observo que la pista se va rompiendo sin ningún mantenimiento, algo que podemos agradecer los de All Mountain y menos los de Gravel.
Casi a la llegada a Tristán giro a la derecha hacia el pico omónimo pero no lo subo, tomo hacia la Masía del Coronel bajando por la pista y, unas decenas de metros antes de llegar a la Masía, giro a la izquierda por un camino que conduce a la Masía Nueva. Paso frente a la cadena de la puerta, sigo, y llego a la pista que sube desde Segorbe-Morruda hacia Tristán. Un poco mas arriba, como me voy viniendo arriba, giro a la derecha con el propósito de llegar al pico del Águila. Con un par y 35°.
De nuevo van llegando pendientes importantes que se hacen cada vez mas pesadas con el calor y, para culminar el calvario, los últimos metros al pico del Águila y el calor que desprende el cemento del ascenso.
Están construyendo una nueva caseta y torre de vigilancia. He felicitado al vigilante por su nuevo chalet :-)
Inicio el descenso por Gatova, 37° en el pueblo y, desde la carretera, tomo a la izquierda para dirigirme de nuevo a Tristán. Al inicio es asfalto y llegando al Molino de la Ceja y las antenas, ya pisamos tierra.
Sigo ascendido, ya cansado, hasta toparme de nuevo con la pista principal a Tristán. En este momento ya le voy pidiendo watios a la bici. Llego a la fuente, sin agua, y hago un merecido descanso. Con las pulsaciones en su sitio, empiezo los 12 km de descenso por el barranco de Viñuela ... cada vez mas roto y disfrutón como antiguamente. La verdad es que uno no baja igual cansado que fresco y, aunque me voy divirtiendo, decido contemplar el entorno y no jugarme ná.
Parada obligatoria el la fuente de la Gota para mojarme entero y enseguida llego al coche, con un cansancio grande pero con una cara de felicidad que parezco gilipollas.
La ruta no tiene dificultad técnica, salvo el control necesario bajando por la gravilla de algunas pistas y las pendientes que te invitan a coger velocidad. La dificultad es física, por el kilometraje y el desnivel positivo acumulado aderezado con un caluroso dia de verano; por eso la califico de difícil.