GORAFE

Después mirar y estudiar bastantes rutas de la zona he terminado por configurar esta tranquila ruta por el desierto de Gorafe.

Fue trazada en un alto porcentaje usando tramos de otras rutas y sobre el mapa fundamentalmente.

El resultado ha sido realizado este pasado día 3-4-21.

Salimos del pueblo de Gorafe, donde dejamos los coches y comenzamos la subida a la meseta, por cierto bastante seria aunque con buen firme y eso ayuda. Para otra ocasión es mejor subir con los coches a lo alto de la meseta ya que esa subida aporta bien poco.

Comenzamos una bajada bien larga con unas vista de película a ambos lados (muchas fotos obligadas) para terminar bajando un puerto en "zetas" que nos dejaba en la Rambla de los Anchurones y que en el enlace, a pocos metros hacia la izquierda, pudimos disfrutar de un sifón enorme de unos 8 a 10 metros de alto, una joya de la naturaleza y fotos obligadas.

Continuamos por la pista rambla abajo hasta el cruce con el barranco del caballo, allí nos desviamos a la izquierda (el cruce es muy tangencial hay que estar muy atentos, no tiene indicador) y seguimos un cauce seco, de anchura muy variada pero perfectamente ciclable con mucha arena, haciendo meandros contínuos por varios kilómetros que es una delicia para las bicis, hasta enlazar con el Camino de los Campos Mones que tomamos a la derecha y que comenzaba con una gran cuesta arriba, para concluir en unas llanuras donde el paisaje era bien distinto a lo anterior, pero con su encanto también.

A su término llegamos hasta un cortijo con ovejas (de Juanjo que fue muy amable y nos dio permiso para pasar por sus tierras) y un cruce de 4 caminos, tomamos el primero a la izquierda (justo delante del cortijo, saludando a sus perros, bien atado el mastín)) que nos lleva a otro punto del mismo camino de los Campos Mena que es casi circular (en la conexión hay una cadena que se pasa por debajo sin problema) y ya seguimos la pista hasta subir de nuevo a la meseta ,pasando por una colina horadada (fotos obligadas) muy curiosa y terminar la subida por el Puntal de Don Diego para continuar, ahora en bajada, hacia los coches en el pueblo de Gorafe.

Ha sido una ruta fácil, con vistas preciosas y que nos ha abierto la curiosidad de esas tierras. Pronto volveremos con nuevas trazadas por descubrir. Para terminar, es obvio, pero mucho ojo, no hay agua, debes de llevar la que vayas a necesitar.