Campo Arcís, cerro del Asno, Solana de las Pilillas

Ruta con un poco de todo que, saliendo de Campo Arcís hacia el sur, nos adentra en parte del Parque Natural de las Hoces del Cabriel
Salimos a 10 C para hacer la ruta a una temperatura media perfecta de 18ºC. Dia soleado, esta ruta la intentamos hace un mes, tras lluvias, y el barro nos impidió continuarla a los 10 Km. rompiendo un compañero el cambio por esta causa. Mejor terreno seco ;-)
El recorrido se inicia igual que acaba, rodando plano entre vides. Enseguida llegaremos al monte por un camino con algún que otro tramo complicadillo por el terreno suelto, la inclinación y las roderas que, en algunos casos, lo ocupan todo. La vegetación ya es fantática y, llegados al km. 11 iniciamos una senda, cerrada, bocólica por momentos, que nos obliga a poner pie al suelo en varias ocasiones por árboles caidos y ascenso por piedras escalonadas, pero nada complicado. Salimos de la senda a un camino medio oculto que rodea unos campos y que nos llevará hasta la primera gran bajada, una pista ancha, plana, perfecta, donde coger velocidades imprudentes resulta sencillísimo. Bajando el paisaje del Parque Natural de las Hoces de Cabriel se muestra en todo su esplendor. Abajo del todo llegamos a una rambla con agua y nos toca mojarnos bien los pies para pasarla por un lateral, nada de montados, podía tener casi un metro.
Iniciamos el ascenso de nuevo por la misma pista pero un poco mas rota por este lado. Pendientes serias, de hasta el 18% a veces, nos hace ganar altura con facilidad, a nuestras espaldas el paisaje verde de las montañas es impresionante. Entre ellas se aprecia perfectamente el vapor de agua de las chimeneas de la central nueclar de Cofrentes.
Aprox. en el Km 25 hemos terminado la subida y allí, en un precioso plano, nos tomamos el merecido plátano de rigor. Llaneamos otro km y medio y nos acercamos al Cerro del Asno. Allí conversamos un rato con el guarda mientras vamos dando cuenta de unos madroños dulcísimos. Las vistas, 360º desde el cerro, no tienen precio. Nos despedimos e iniciamos de nuevo el decenso por la pista, ancha, en suave bajada, y la abandonamos a derechas en una casona blanca, Casas del Doctor, para tomar un camino carretero que tanto nos gustan, cada vez mas compicadillo sobre todo en bajada y cuando vamos a subir, senda a derechas.No se ve bien y hay un montoncito de piedras que la señala, nosotros nos la pasamos. Es de bajada y está muy muy rota por las lluvias, es cortita, nosotros la hicimos a pie. Nos deja en otra rambla, también con un montón de agua que, junto con los calcetines de lana, los hongos los tenía de carnaval. Nada mas salir de la rambla tomamos un precioso camino, sube baja, con las piedras justas para ser divertido. El camino pasa junto a unas bodegas Íberas del siglo VI-V a.C., interesantísimas por su antiguedad y constrcción, nos revela como el vino siempre ha sido una actividad importante en esta tierra. Un poco mas tarde bajamos de nuevo a la rambla para visitar la fuente de Los Morenos, que dicen que sus aguas son medicinales.
Solo nos quedan uno cuantos kilómetros, facilitos, casi planos, entre viñedos, y que nos devuelve a Campo Arcís con una sonrisa tonta en la cara.
La ruta se la debemos a nuestro recordado amigo Anibal. Desde aquí un abrazo donde estés.