50KM E BOGARRA. PADRASTRO. POTOCO. PICAYO. VIZCAINOS

Cuarenta kilómetros y me ha sobrado el 15 % de batería.... ¿Se trata de un problema, de un desastre, de algo normal?. Pues es algo muy normal.
El otro día me preguntaron que autonomía tiene la bicicleta eléctrica y le contesté que de muchas cosas. Si resulta que hace un par de días marché hasta Toledo y tras 250 kilómetros me sobró el 49 % de batería, hoy, tras 40 kilómetros me ha sobrado el 15 % de batería.
La ruta de Toledo tenía 1000 metros de desnivel y esta de hoy, 1300 metros de desnivel, pero claro, no es lo mismo 1000 metros de desnivel en 250 km que en 40 km. Además resulta que, en las subidas de hoy se han hecho dos sendas hacia arriba, sendas con piedra suelta, con inclinación y complicadas con un total de 700 metros de desnivel. Tienes que tirar de fuerza, técnica y batería, mucha batería pero no demasiada pues la rueda tiene que traccionar. De esta manera no gastarás la batería, casi la quemas literalmente como ocurre en los coches cuando te pasas de velocidad adecuada. Pero eso sí, disfrutas como un enano subiendo por donde no se puede, por donde parece que no se puede, donde es difícil y fácil y te lo pasas fenomenal.
Luego llegas al Padrastro como paso la primera vez hace veintiocho años aquel fin de semana que marché de Albacete con la tienda de campaña en la bicicleta. Tranquilidad, vistas únicas y privilegiadas.
Despues comienza otro festival, el de la bajada, por pista y senda y a todo trapo, tela marinera lo bueno y lo bien que lo pasas con la Turbo Levo.
Al terminar remontas al Picayo y otra senda de regalo en bajada, vuelves a remontar y la senda de los Vizcainos.
Terminas junto al río, por las calles del pueblo y contento y cansado, sabedor que cada día que pasa continúas con ilusión, con la misma que comenzaste, renovado y con experiencia.
Sin lugar a dudas, esta tarde ha sido una gran tarde de bicicleta.