50KM CON JOSÉ LUIS Y LOS SUYOS, LO MEJOR DE EL CAMPELLO

"Solo se que no se nada" es lo que dicen que dijo una persona que califican a día de hoy como filósofo de apellido Descartes. Eso, traducido al castellano poligonero como dice mi cuñada, es como decir que "mira que pensaba que lo sabía, pero me he dado cuenta que no tenía ni puta idea".
Y eso es lo que me ocurre siempre que salgo con esta gente de el Campello. Lo que sucede es que cada vez que los veo me doy cuenta que pasa la vida para ellos y para mi. Año tras otro van cambiando, unos vienen y otros van y en esta ocasión tan solo se mantiene de la vieja guardia el amigo José Luis. Del resto que decir si se juntan con este "insurrecto", pues que no pueden ser mala gente y más cuando uno de ellos estaba en la GALP tomando café mañanero con su padre que también saldría con la bicicleta con otra peña.
Suerte de haber podido ver a Miguel tras su tremenda operación pero con su personalidad única y tan afable, de los cinco magníficos de hoy que decir... pues que pedaleaban con ánimo y alegría, que bajaban con soltura y que el que suscribe ha tenido que regular en alguna ocasión pues tanta alegría en las bajadas puede tener "dramáticas" consecuencias.
Paradas amenizadas con chascarrillos y un par de cervezas repasando esto y lo otro no puede ser nada malo para comenzar un domingo.
Así es que aquí se cierra mi periplo estival a lo grande, aún con rutas por colgar pero con esta especial en la que da gusto salir con gente como esta.
Un saludo al resto de ausentes y conocidos y al gran José de Ochoa Bikes y a su mecánico que tan bien me han tratado en mis roturas y averías, haciendo posible poder salir cuando y donde quisiera.
Un saludo a todos y nos vemos el año que viene.