Rennes - París 2023. Etapa 10: Cabourg - Le Havre

Etapa que ha acumulado el mayor desnivel hasta ahora. Además, ha sido la que menos carriles bici ha tenido y más tráficos hemos tenido.
Se sale de Cabourg y se va recorriendo la costa pasando por muchos pueblos turísticos seguidos unos de otros. Los paseos marítimos los suelen tener cerrados a bicicletas por la afluencia de gente que sale a pasear. Ha coincidido también que ha hecho un día de sol y todo el mundo se había echado a la calle.
Los pueblos por los que se pasa tienen multitud de casas de la “Belle Epoque” y es un espectáculo ir viendo cada una de ellas, cada una diferente a la anterior.
En Houlgate nos metimos por un camino de tierra siguiendo el track original. Ese camino tiene algunos escalones que requieren portear la bici. Se puede evitar continuando por la carretera en lugar de por el camino.
La guinda del pastel está en Honfleur, un precioso pueblo portuario medieval que conserva la iglesia de madera más grande de Francia. Ahí paramos a comer en uno de sus muchos restaurantes que hay en el paseo peatonal. Decir que dejamos las bicis candadas con la alforja y sin problemas, Como hemos hecho muchas veces este viaje.
Tras esto, continuamos a Le Havre, con la experiencia de pasar el puente.
INSTRUCCIONES SOBRE CÓMO PASAR EL PUENTE (o como recomiendo pasarlo):
El puente tiene dos carriles para coches, uno para bicis y uno peatonal en cada sentido, pero el de bicis no es más que el arcén pintado y no está separado de los coches. Además, el tráfico de camiones es muy alto por la cercanía del puerto, van muy rápidos y el aire que te sueltan puede desequilibrarte. Por este motivo y, aunque veas muchas señales de que te metas en el carril bici, no lo hagas y sigue por donde los peatones. Nosotros no nos hemos encontrado CON NADIE en todo el puente. Cuando llegas al peaje, de nuevo insisten con carteles en que vayas por el carril bici, que se separa del de peatones. Nosotros seguimos por el de peatones, que termina en un puente que cruza el peaje por encima por un puente y hay que subir unas escaleras. Nosotros porteamos la bici por esas escaleras (es fácil, solo son dos tramos), cruzamos el puente y volvimos a bajar las escaleras por el otro lado. De hecho nos encontramos allí con dos chicas que hicieron lo mismo. Una vez abajo, solo hay que seguir el carril bici para Le Havre. Hasta la ciudad en carril bici está muy bien y de paso contemplas el ajetreo de camiones y las montañas de contenedores del puerto.
La etapa ha supuesto algo más de estrés por tráfico al ir por carreteras con bastantes coches y teniendo en cuenta que no se suele respetar el metro y medio de distancia con las bicis, aunque sí suelen ser pacientes con los ciclistas y se ponen a nuestra velocidad hasta que pueden adelantar, aunque luego te pasan cerca.