Urrao-Alto de la Nevera-Caicedo-Vda Salazar-Anzá

RUTA DEL MONDONGO
URRAO-ALTO DE LA NEVERA-CAICEDO-VDA SALAZAR-ANZÁ
16 y 17 de mayo de 2015

Ésta montada en cicla por la cordillera occidental, nos permitió pasar del suroeste al noroeste antioqueño.

Durante dos días recorrimos 86km por algunos de los pueblos más lejanos, antiguos y estigmatizados de nuestra geografía: Urrao, Caicedo, Anzá.

Así estuvo ésta travesía que contó con la buena compañía de Diana Ramírez, Javier Montoya y Hernán Restrepo.

1re DIA: URRAO-ALTO DE LA NEVERA-CAICEDO 36KM

La jornada comenzó en Urrao el segundo municipio más grande del Dpto de Antioquia ubicado a 5 horas de Medellín.

Este asentamiento, llamado en otrora Xundabé, que significa Refugio de palomas; está asentado en un bello valle formado por el Río Penderisco. Su poblado se convirtió en paso obligado de quienes transitaban entre el Chocó y Antioquia

De la tierra del ciclista Rigoberto Urán; se puede pedalear al Municipio de Carmen de Atrato http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=2560144.)

También se puede ir a Altamira, corregimiento de Betulia o dirigirse a Caicedo. Nosotros nos decidimos por éste último municipio.

Después de un suculento mondongo emprendimos el ascenso al Alto de la Nevera. Este lo hicimos por una tendida y hermosa vía que pasa por Jaiperá un paraje que lleva el nombre de una de las tantas y tantos caciques que habitaron la región. Noquita, Anocozca, Asesí, Urrado, Sundabe y Toné fueron otros caciques de ésta zona.

Seguimos en ascenso, pasamos por La Margarita, Aguapanto, Quiebrapatas y Chuzcal Arriba hasta coronar el Alto de la Nevera ubicado a 2.800 mts sobre nivel del mar y a 20km del casco urbano. Allí nace el Río que lleva el mismo nombre y surte de agua a Urrao.

Si bien la subida es larga, su grado de inclinación no es duro lo que la hace muy pedaleable y placentera. Ojalá todos los ascensos fueran como este jejeje

Una vez en el alto aprovechamos para recargar energías, cambiar las pastas de uno de los frenos de mi bicicleta y prepararnos para emprender el descenso de 15 km a Caicedo.

Aunque el nombre del alto sugiere la presencia de un clima poco amigable, nosotros contamos con buena suerte ya que el sol salió para atenuar el frío que hace en “La Nevera” donde la vegetación es aún abundante, exótica, silvestre.

Minutos más tarde volvimos a las ciclas para empezar la bajada a Caicedo. Ésta la hicimos por el costado izquierdo del Río Asesí que durante su recorrido forma bellos parajes.

Cayendo la tarde, después de 36km recorridos llegamos a éste municipio que, año tras año, celebra las Fiestas de la Fraternidad y La Reconciliación.

Para reponer fuerzas nos dispusimos a comer y por segunda vez la sopa fue Mondongo!

2do DÍA: CAICEDO-VDA LA SALAZAR-ANZÁ 50 KM

Mientras nos preparábamos para la segunda jornada, platicamos con Balmores Tamayo un caicedeño que nos ilustró sobre su tierra. Nos contó que la vía Urrao-Caicedo-Sta fe de Antioquia, de 38km; tiene tan sólo 31 años de construida y se hizo para extraer carbón.

También nos dijo que para ir a Anzá –nuestro próximo destino- no había que bajar hasta El Cauca y volver a subir, ya que hay una carretera que va directo a ése municipio por la vereda La Salazar por donde, dicen, también hay un camino de herradura para caballos y caminantes que une estos dos pueblos por un sector llamado Canalón Oscuro. El mismo canalón que recorrió varias veces la madre de Balmores cuando no existían carreteras.

La salida de Caicedo se retrasó por cuenta de la lluvia y sólo al medio día montamos las ciclas para emprender la ida a Anzá, uno de los pueblos más antiguos de Antioquia (Año fundación 1.560).

Pasamos por el cementerio y cruzamos uno de los tantos ríos de ésta vía que se caracteriza por atravesar decenas de corrientes de agua que hacen parte de la Reserva hídrica dl Occidente.

A excepción de una subida de 6km al principio de la jornada; los primeros 22km se hacen por una serie de columpios con varios descensos y ascensos que no superan los 2km cada uno pero que, por la cantidad, se van acumulando en las piernas.

Este sube y baja nos llevó por La Manga, El Encanto, La Soledad, La Cascajala y La Salazar. Si bien desde allí aún no veíamos el Río Cauca, las imponentes montañas del frente anunciaban su presencia.

Después de varios kms el panorama se abrió y vimos abajo, bastante lejos, el serpenteante río que divide la Cordillera Occidental de la Central. Un poco más allá visualizamos a Anzá que, desde arriba, luce pequeño en medio de un árido paisaje.

Dejamos la parte alta de la montaña y emprendimos el descenso de 27km a nuestro próximo destino.

Cruzamos los Llanos (que de llano no tiene nada) Jelpiya, Nudillo, La Cinta y Travesías y entramos es un solitario sector que nos condujo a las partidas de Guintar en donde la vía a la derecha da la posibilidad de seguir a Altamira y Betulia.

Nosotros continuamos a la izquierda para acabar de llegar a Anzá un pueblo que en tiempos de la colonia se conocía como “Río Arriba del Cauca” pues se construyó 4km arriba de dicho río.

Con los últimos rayos de sol llegamos al casco urbano y tras instalarnos fuimos en busca de una buena cena. Lo más particular fue que de nuevo, por tercera vez, la sopa fue: Mondongo!

De ahí el nombre de ésta divertida, corta y fácil ruta por el sur-noroccidente antioqueño.