Activity

Travesia 2016 - 06 - Manzano alto - Hornopiren

Download

Trail photos

Photo ofTravesia 2016 - 06 - Manzano alto - Hornopiren Photo ofTravesia 2016 - 06 - Manzano alto - Hornopiren Photo ofTravesia 2016 - 06 - Manzano alto - Hornopiren

Author

Trail stats

Distance
13.31 mi
Elevation gain
1,066 ft
Technical difficulty
Moderate
Elevation loss
1,407 ft
Max elevation
617 ft
TrailRank 
55
Min elevation
617 ft
Trail type
One Way
Time
3 hours 19 minutes
Coordinates
1773
Uploaded
July 6, 2016
Recorded
February 2016
Be the first to clap
2 comments
Share

near Palihue, Los Lagos (Chile)

Viewed 575 times, downloaded 7 times

Trail photos

Photo ofTravesia 2016 - 06 - Manzano alto - Hornopiren Photo ofTravesia 2016 - 06 - Manzano alto - Hornopiren Photo ofTravesia 2016 - 06 - Manzano alto - Hornopiren

Itinerary description

Travesia 2016 - 06 - Manzano alto - Hornopiren

Waypoints

PictographMountain hut Altitude 459 ft
Photo ofHospedaje Manzano Alto Photo ofHospedaje Manzano Alto Photo ofHospedaje Manzano Alto

Hospedaje Manzano Alto

Hospedaje excelente en Manzano Alto, una familia que posee 2 habitaciones en alquiler, la primera idea era quedarnos solo para dormir y continuar, pero la armonía de esa casa logro que termináramos cenando juntos, charlando de muchas cosas, desayunando y paseando con ellos por sus campos, por su quinta, sus sembrados de papa y hasta ayudandole a traer leña con bueyes y recién después de almorzar continuamos viaje. Un detalle importante, el lugar no es un hostal lujoso y pagamos algo menos del 50% de lo que en la zona sale un alojamiento y en excelente comodidad

PictographMountain hut Altitude 23 ft
Photo ofHospedaje El Bote

Hospedaje El Bote

Comodo y economico hospedaje en Hornopiren, en el mismo lugar me habia hospedado el año anterior CHI 7000 (U$S 10) cada uno con una amplia habitacion privada con vista a la calle, baño compartido y derecho de uso de cocina a gas

PictographProvisioning Altitude 30 ft
Photo ofSupermercado

Supermercado

el super mas grande de la ciudad, con una amplia variedad de articulos y buenos precios

PictographWaypoint Altitude 30 ft

Ferreteria - Bicicleteria

es uno de los pocos lugares sobre la carretera austral para conseguir repuestos para bicicleta, cada año tiene mas repuesteria por suerte

PictographBeach Altitude 13 ft
Photo ofCaleta Pichicolo Photo ofCaleta Pichicolo Photo ofCaleta Pichicolo

Caleta Pichicolo

localidad rural dedicada a la pesca, criadero de mejillones (o choritos como los llaman en Chile) y al turismo por sus termas, las cuales para acceder hay que ir en lancha o bote exclusivamente. Posee un restaurante costumbrista con buena, rica y economica comida.

PictographBeach Altitude 0 ft
Photo ofCaleta El Manzano Photo ofCaleta El Manzano Photo ofCaleta El Manzano

Caleta El Manzano

Caleta El Manzano o Caleta Manzano es una localidad costera que pertenece administrativamente a la comuna de Hualaihué. Se vio afectada por la crecida del estero en mayo de 2015 Caleta El Manzano se encuentra a 4 kilómetros de El Varal, 7 kilómetros de El Cisne, 8 kilómetros de Caleta Pichicolo, 23 kilómetros de la capital comunal Hornopirén y 34 kilómetros de Contao. Hay camping, alojamiento y lugares donde comparar viveres. Y se realiza durante uno fde los fines de semana de Febrero una famosa fiesta costumbrista chilena,

PictographRiver Altitude 118 ft
Photo ofRio Pichicolo Photo ofRio Pichicolo Photo ofRio Pichicolo

Rio Pichicolo

PictographProvisioning Altitude 30 ft
Photo ofFeria Costumbrista Photo ofFeria Costumbrista Photo ofFeria Costumbrista

Feria Costumbrista

El contacto habitual y amistoso con la naturaleza, con su belleza, sus encantos, con el misterio de la vida que alberga en su seno, con la entrega renovada de sus generosos frutos, hacen del hombre y la mujer de campo, personas estables, serenas y solidarias, ancladas en un sentido común robusto. Por otra parte las leyes inherentes a la Naturaleza, no dependiendo de dictámenes humanos ni respondiendo tampoco a automatismos mecánicos, tienen sus imprevistos cuyos desencadenamientos nadie puede dominar. Las gentes del agro son llamadas a convivir frecuentemente con riesgos y adversidades que deben ser enfrentados súbitamente o superados con paciencia, espíritu de lucha y esfuerzo perseverante. Todo predispone el espíritu del hombre y la mujer del campo a una posición más aguerrida y al mismo tiempo más humilde; más vigilante y desconfiada, pero también más admirativa con la bondad del orden creado y más dependiente del Dios que lo creó. Las gentes del campo conservan, por eso mismo, más fácilmente viva la Fe de sus ancestros y la defienden; aman entrañablemente y dan valor a su universo y cultura huasa y el hábitat en que se desarrolla y todo ello forma un cierto unum armónico en su espíritu, pleno de contenido y no carente de misterio. Son gentes a quienes les gusta tener hábitos y conservarlos, transmitir y comentar las historias y las leyendas rurales en sus veladas familiares o sociales, rememorar y preservar las costumbres de sus ascendientes, que son también las de la tierra. Con los pies bien puestos en el suelo que pisan, plenos de una sabiduría empírica acumulada y transmitida de padres a hijos, encuentran en la paz de los campos y los empeños de sus labores diarias, espacios para la reflexión meditativa y para la admiración contemplativa. Sienten en la profundidad de sus almas --y muchas veces con veneración-- que si la Naturaleza les impone a veces sufrimientos, el orden creado es esencialmente bueno, dadivoso y mayor que cada uno de ellos; orden del ser y del misterio de la vida, nacido de la Bondad y del Bien por excelencia que es Dios creador. De la consonancia de fondo --más experimentada que racionalmente explicitada-- con la utilidad, la bondad y la belleza de esta ordenación general, en medio de la cual se desarrollan sus vidas y las de sus familias, surge naturalmente la disposición a la gratitud ante los beneficios y frutos que de ella obtienen. Tal disposición tiende naturalmente a acentuarse cuando, después de cumplirse los ciclos de preparación, plantación, gestación y espera, se alcanza, finalmente, la coronación del esfuerzo realizado con tanto empeño y cariño: el momento feliz de la cosecha. Desde tiempos inmemoriales ello se repite en los cultivos ancestrales como el trigo, la uva, la oliva y tantos otros, o en la separación y rodeo de los animales. Hora de legítima alegría colectiva ante la empresa común llegada exitosamente a término. Más allá de contabilizar los resultados, la comunidad campesina mide entonces la dignidad y el valor moral de su trabajo. Emerge ante ella toda la dimensión cultural viva de sus faenas diarias; toma consciencia de si misma como cuerpo moral; siente con templanza su felicidad de situación y la agradece a Dios. A modo de gran familia ampliada, que ha ido generando sus propios ritos y costumbres, se reviste en la ocasión de sus mejores galas y --elevándose por encima de su propia cotidianidad-- festeja. Ritos, galas y festejos, sucediéndose, en cierto momento ya son entrañable tradición. Nacen así las Fiestas Costumbristas, que hoy se multiplican en Chile: fruto de esta antigua y venerable raíz agraria y cristiana --hermanas por lo mismo de las Fiestas Religiosas Populares-- donde las gentes de nuestra tierra celebran su modo de vida característico, sus usos y tradiciones, su mundo cultural y social, en definitiva, su identidad y la ofrecen amistosamente, como un bien muy preciado, al visitante citadino o al turista extranjero. Por otro lado, también el habitante de nuestras ciudades experimenta hoy una evidente necesidad de escapar al vacío y la trivialidad del materialismo, al ateísmo práctico contemporáneo, a su tristeza gris y a su insoportable vulgaridad y prosaísmo. Unos y otros sienten el imperativo de llenar de ser y de significado moral la precariedad y los vacíos de nuestro sistema de vida moderno, de enriquecer con su proyección cultural nuestros ciclos de trabajo e incluso nuestros descansos y entretenimientos. Hay necesidad de entrelazarlos con la tradición, de valorizarlos con la patina especial de antigüedad y nobleza que les da la historia. Los trabajos del campo, o los de la pesca en zonas costeras, elevados al nivel simbólico de una celebración colectiva cuando se cumplen algunas de las etapas del ciclo productivo, se levantan por sobre su cotidianidad para transformarse en celebración de Vendimias, Trillas a Yegua Suelta, Sagras de la Oliva, Rodeos; en la fiesta del Kuchen, de la Frutilla, del Digüeñe o del Changle, del Cabrito, del Chancho o del Cordero, del Curanto y los frutos del mar. Los antiguos ya festejaban estos hitos, el mundo moderno conservó estas fiestas durante mucho tiempo un poco arrinconadas y empolvadas en el ámbito rural o litoranio a título folclórico… Hoy estas celebraciones de las costumbres del país vuelven con fuerza y revigoran con ellas la artesanía, la música, las danzas típicas y la culinaria local, manifestando la identidad de nuestra cultura viva y dándole colorido; atrayendo al mismo tiempo el turismo y favoreciendo el comercio y el desarrollo regional. Su multiplicación notable desde un tiempo para acá comunica un tono, un contenido, una alegría, una belleza y una densidad de ser a nuestra existencia presente. Son ecos poderosos del Chile antiguo y profundo, luces de la Tradición capaces de inspirar el futuro. Sepamos escuchar lo que nos dicen y vislumbrar el horizonte hacia donde apuntan.

Comments  (2)

  • Javiera_Hualaihue Dec 31, 2017

    Excelente ruta! 100% recomendable, toda una aventura con bellezas escénicas increíbles, los mejores paisajes de Chile los he visto realizando esta ruta! Nunca olvidare este viaje!

  • Photo of ZorbaMan
    ZorbaMan Jan 2, 2018

    Lugares para fundir en la memoria, indudablemente

You can or this trail