Cuyalaret. 16-MAR-2024

Una ruta sencilla, matinal, para estirar las piernas saliendo desde el Portalet, en la frontera con Francia. Tiene un desnivel asequible para iniciarse en el esquí de montaña, sin dificultades especiales y muy adecuada para ir adquiriendo recursos que se utilizarán en terrenos más comprometidos.
Desde el aparcamiento del Portalet, pasadas las Ventas, a pocos metros de la misma frontera francesa, se sube a pie, por un camino muy marcado por paseantes de crampones y raquetas, hasta llegar a un llano en el que se ponen los esquís y se dirige la huella hacia el Oeste, teniendo a la izquierda el Campanario de Anéou, un monte de forma inconfundible. Se van subiendo lomas en esa dirección viendo la cumbre al fondo, sin pérdida. Es posible subir por las palas de la izquierda, más sombrías y más directas, o por la derecha, en sucesión de lomos con poca inclinación y más soleados. Hasta llegar a la pala final, más pendiente, no hay dificultades notables, sólo la progresión continuada de ascensos no muy exigentes.
Los últimos metros exigen más atención, pero es una pala franca que se sube sin tregua hasta llegar a una amplia cima (3,2 km desde el inicio) con muy buenas vistas sobre la Canal Roya, Anayet y Midi, cercanos. Y otros más alejados como los de Aspe o Bisaurín, Garmo Negro, Infiernos y Balaitús.
La bajada la hicimos bordeando la arista para dirigirnos hacia la Punta Cubilaret, al collado bajo esta cima que conecta con la estación de esquí de Formigal en el final del remonte de Espelunciecha. Descendemos por esta pista hasta el aparcamiento del Portalet. Luego hay que andar un kilómetro hasta el aparcamiento desde el que salimos.